Conozcamos a David Martínez

Como Director Comercial Sénior, soy el responsable de todas las ventas y el márketing en México y Latinoamérica. Paso cerca del 90 % del tiempo en las oficinas de México, y el resto lo paso visitando distintos clientes en la región de Latinoamérica.

Trabajo aquí desde 2012. Cuando Refresco compró la compañía en 2018, nos integramos en la plataforma de Norteamérica. Formamos parte del equipo global y compartimos un objetivo claro y común y una serie de valores.

Aunque mi trabajo se centra en una zona geográfica concreta, la sensación es realmente global. Conocemos a nuestros homólogos de otras partes del mundo, nos vemos en las formaciones de liderazgo y aprendemos de sus éxitos y compartimos los nuestros.

La flexibilidad es el elemento fundamental de nuestra forma de trabajar. Refresco, como compañía, quiere que todos sus miembros entiendan la misión y actúen en consecuencia. Caben los errores y las equivocaciones, pero necesitamos conseguir resultados -y lo hacemos.

"Me siento empoderado por los valores de la compañía y por su estructura."

- David Martínez, Director Comercial Sénior, México y Latinoamérica

Líneas de comunicación abiertas

Para mí, tiene un profundo impacto. Las líneas de comunicación están abiertas de oficina a oficina y desde la alta dirección hasta los empleados sin experiencia. Eso ha creado un entorno de trabajo solidario, ágil y dinámico, y la responsabilidad que va con ello es una enorme fuerza motivadora.

Dentro del programa de liderazgo he estado en contacto con tres personas que realmente me han ayudado mucho a avanzar por la compañía desde la adquisición del año pasado: el Director de RR.HH. del Grupo, el Consejero Delegado y mi mentor, el Director General de Refresco Italia.

Recibir orientación de esas personas ha resultado muy inspirador: aunque somos una compañía de alto rendimiento, la alta dirección está muy centrada en el personal, independientemente de en qué parte de la compañía trabajen. Espero destilar el mismo tipo de entusiasmo a mis trabajadores en nuestras reuniones diarias que mis mentores destilaron en mí.